Siento como cada día se van
mermando mis derechos como persona, nos acechan como lobos y con el sigilo del ladrón nos
van robando nuestra libertad, nos hurtan poco a poco unos derechos que ganamos con el sudor y la sangre de toda una
generación que vivió encarcelada en las cuatro paredes de una larga e inútil
dictadura. Aquella a lucha, envuelta en dolor, muerte y dignidad consiguió
el gran triunfo que supuso un Estado social, democrático y de derecho.
En los últimos años se ha atentado
gravemente contra derechos inherentes de las personas, se ha atentado
contra derechos fundamentales de forma muy sibilina, sin apenas darnos cuenta,
nos van coartando, nos dirigen dejando cada vez menos espacio a la persona y
más al siervo.
En los últimos días, nuestros
dirigentes han acribillado un derecho
fundamental como es la tutela judicial efectiva, nos despojan del derecho a
defendernos y lo hacen con un golpe en la mesa, lo hacen con la imposición de
unas tasas judiciales abusivas; unas tasas judiciales que abren una gran brecha
entre aquellos que tengan dinero para litigar y aquellos que no tengan dinero
para litigar y no puedan acogerse a la asistencia jurídica gratuita; unas tasas
que nos dejan indefensos ante el poderío de la Administración Pública.
De ahora en adelante habrá que
pagar unas tasas abusivas que nos pueden dejar sin indemnización en despidos,
sin poder reclamar una multa ante el Contencioso-Administrativo, que va a dejar
a los morosos campar libremente a
sabiendas de que no interesa demandar y nos va a dejar sin poder recurrir una
resolución con la que no estamos de acuerdo.
Nuestra libertad agoniza como en la
mejor de las dictaduras…
Sobre todo, veo que se encarecen los recursos. En general, aunque he oído razones de que no, tienen un claro afán recaudatorio, como en todo ocurre hoy. Pero aún pareciéndome mal la subida, aún me parecería razonable si el mínimo a partir del cual se aplicase fueran rentas anuales muy superiores. 19.000 euros es una renta ridícula, para considerarla como suficiente para afrontar estas tasas y demás gastos. Como siempre, no los menos pudientes, que esos si están a salvo del pago, sino la clase media es la que acaba pagando el pato. Las rentas de entre 20 y 50 mil euros anuales son las que acaban pagándolo todo. Y hay que ver cómo esa clase media está adelgazando. Cuando ya no exista, veremos quien sostiene esto.
ResponderEliminarUn saludo.
Tu análisis es increiblemente cierto, exactamente lo que piensa el groso que deja sus pensamiento libre de contaminacion periodística...
EliminarUna gran conclusión que es el pensamiento de muchos..
Un abrazo